Desde que salimos del cole he tenido
unas vacaciones estupendas.Justo el día después de que salimos, lo primero que
hice fue DESCANSAR, aunque he estado haciendo unas cuantas tareítas de vez en
cuando.Bueno ahora os voy a contar algunas de las salidas que he hecho:
Un día mis papás y mis abuelos
necesitaban hacer unas vueltas. Después de terminarlas almorzamos en DON JEDIONDOcerca de CENTROCHIA un centro comercial donde fuimos después de
almorzar. Allí hay un parque muy
grande donde fui a jugar con el permiso de mis papás.
¡ME DIVERTI MUCHO EN
AQUEL LUGAR!
Ese mismo día planeamos ir a LA LAGUNA DE TOTA.
Al día
siguiente todos nos levantamos muy temprano, y fuimos a recoger a mis abuelos,
ya para irnos y salir de Bogotá. A mitad de camino paramos a desayunar todos
juntos. Desayunamos: huevos, pan, queso, arepa, caldo y chocolate, aunque yo
solo me comí el queso y me tomé el chocolate. Luego salimos de desayunar y
empezamos a visitar los pueblitos a los
que habíamos pensado ir.
Uno de los pueblitos que visitamos fue IZA. Fue genial y
me divertí mucho. Apenas llegamos nos bajamos para conocer el lugar. Primero
entramos a la iglesia que era muy grande y el cura nos contó que en el altar de
la iglesia había una piedra, que en la mitad de ella había un rostro, y el
rostro era el de Jesús. Nos fuimos a verla y era ciertísimo. Luego salimos de la iglesia y vimos el pesebre
que estaba hecho de papel
pintado de dorado. Dimos una vuelta y pasamos por el lado de unos postres que
estaban llenos de abejas. Después fuimos a comprarle un saco a mi primita y me
compraron un FUCHI y unas orejeras navideñas. Como la vendedora nos hizo un
descuento, también le compramos a mi primita un gorrito que es dudoso que se lo
deje colocar.
También
estuve en otros lugares como Aquitania, Monguí, Corrales, Pueblito Boyacense y Playa
Blanca.
Ayer 3 de enero de 2015 fuimos con mis
abuelos a la laguna de Guatavita,que está cerca de Bogotá.
Salimos muy temprano de casa y empezamos la aventura. Llegamos al lugar
y un guía nos acompañó todo el camino mientras
que nos explicaba la historia del lugar, y una cosa que me sorprendió
fue que teníamos que caminar una hora para
verla. Cuando llegamos era hermosa la laguna desde aquella vista, pero
aun teníamos que caminar 40 minutos hasta el carro. Llegamos muy contentos al
carro, pero muy agotados de caminar, en una tienda habían unos pequeños recordatorios,
y uno de ellos lo compré con mi plata. Luego dimos una vuelta al pueblito de
Guatavita, hicimos algunas compras de cachivaches y regresamos a Bogotá.
Yo
en el Cusmuy camino a laguna de Guatavita
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